La fotografía fue lo que nos llevo a conocernos, nuestro trabajo y pasión.
Desde que era muy pequeña supe que quería contar historias, primero pensé en escribir telenovelas, al ser mexicana era algo muy cercano a mi cultura, luego me apasione por los libros y las historias fantásticas y reales. Fui creciendo y decidí estudiar Ciencias de la Comunicación en la Universidad Veracruzana, pensé que tomar como terminal periodismo podría ayudarme a estar más cerca de mis sueños: ser una «narradora de historias», pero para aprender a contar la historia de los demás debía relatar los hechos de mi vida y para eso tenía que conocerme, aún estoy en el camino por aprender quien soy y mejorar cada día, pero la foto me ha acercado cada día más a mi propósito: CONTAR HISTORIAS, ser una cuentista, la fotografía y el vídeo me ha dado TODO y cuando digo todo es una realidad, me llevo a viajar, conocer personas increíbles y encontrar a mi AMOR ETERNO: Fran Russo
En la travesía que llevo recorrida estoy agradecida con este arte, con todo lo que he aprendido no solo técnica y profesionalmente si no en lo personal y espiritual, hoy estas fotos quedan aquí como un sello de nuestro gran amor, un recuerdo al que me acercó cada vez que necesito.
Por eso hoy más que nunca se de la importancia de una foto y un vídeo, sé de su poder, sé que si me eliges soy responsable captar cada momento, de su esencia.
Las flores se marchitaran, el vestido se guardará pero las fotos y vídeo que darán por siempre como una huella imborrable en el tiempo de lo que son, de la muestra de su amor.
Mandame un mensaje y cuéntame su historia:
Whatsapp en el 0034 634 56 53 44 haciendo click aquí
Comparto aquí algo que hablamos siempre con cada pareja. Las primeras fotos son las favoritas de Fran. Al final las mías. A la hora de elegir qué fotos se entregan no borramos imágenes que pueden parecer muy similares pero que no son iguales. Esta sesión que me hizo mi esposo, Fran Russo, fueron apenas diez minutos y el resultado como 200 imágenes. En esta ocasión Fran las fue a revisar y borró algunas desenfocadas, que eran exactamente iguales o que tenía cerrados los ojos o a medio cerrar.
Quedaron unas 140 y luego había algunas bastante similares. Pero sucedía lo que le contamos a las parejas. Ante dos imágenes bastante parecidas una le gustaba a Fran y otra a mí. De hecho una no me gustaba nada a mí pero mucho a él, y viceversa. Por eso siempre decimos que no somos nadie para borrar fotografías y que nunca las vean los clientes, solo las claramente tienen errores técnicos.
Sabemos que mucha gente prefiere tener menos y que hagan el trabajo por ellos, pero eso les priva de tener mejores imágenes, más fieles, más reales, más sinceras. Esa es la razón por la que trabajamos así. En nuestros cursos explicamos que hacerlo significa perder mucho tiempo seleccionando, que finalmente se hace de prisa y muchas veces se pierden algunas de las fotografías que la pareja elegiría quizás como sus favoritas. Hacemos a los demás lo que nos gustaría que nos hicieran. Comprueben ustedes mismos como hay matices que diferencian una selección de otra, quizás en matices, pero preferimos trabajar así.
NOTA DEL AUTOR: Gracias esposo, esta fue la últimas fotos que me tomaste y cada vez que las veo entiendo perfectamente la importancia de una imagen preciosa donde se capta tu alma, tu siempre supiste quien era, buscabas la esencia dentro de los ojos de cada persona que fotografiabas, hoy yo me comprometo a realizar lo mismo con cada pareja, hacer lo que me gustaría que me hicieran, imágenes que valen oro, fotografías y vídeos que al verlas hacen que se te caigan unas lagrimas de pura felicidad. Quizás ahora me tomas fotos desde donde estas, hoy yo seguiré captando instantes por ti.
Karen Reca.
